En caso de que requieras consultar la Guía Pedagógica del Módulo Filosofía, puedes encontrar el material necesario a partir de la página 28 del documento disponible en la siguiente dirección:
https://izta5-pro.webcindario.com/sexto_semestre/Basica/Guia_Filosofia_FLSF-00_Rev.pdf
Recuerda que puedes profundizar en la información aquí proporcionada, con la proveniente de fuentes confiables, así como las fuentes de consulta sugeridas en tu Guía Pedagógica:
Bibliografía básica
Albarrán, Mario. Filosofía. México, Editorial McGraw Hill, 2009.
Ayllon, José Ramón; Historia de la Filosofía, España, Ed. Ariel, 2004
Escobar Valenzuela, Gustavo. Filosofía un panorama de su problemática y corrientes contemporáneas. Segunda Edición, México, McGraw
Hill, 2010.
Xirau, Ramón. Introducción a la historia de la filosofía. México, Editorial UNAM, 2000.
Bibliografía complementaria
Abbagnano, Nicola. Diccionario de filosofía. Segunda Edición, México, Fondo de Cultura Económica, 2002.
Angulo Parra, Yolanda. Filosofía. México, Editorial Santillana, 2009.
Zavater, Fernando. Historia de la Filosofía: Sin temor ni temblor, México, Espasa Calpe, 2010.
Páginas web
El origen de la obra de arte. Disponible en: http://www.heideggeriana.com.ar/textos/origen_obra_arte.htm (07-01-11)
El caso Semmelweis. Disp: http://www.scribd.com/doc/20393537/La-investigacion-cientifica-invencion-y-contratacion-Carl-G-HEMPEL (01-11-10)
La filosofía de Platón (Ética). Disponible en: http://www.webdianoia.com/platon/platon_fil_etica.htm (07-01-11)
La filosofía de Platón (La teoría del conocimiento). Disponible en: http://www.webdianoia.com/platon/platon_fil_cono_2.htm (07-01-11)
La filosofía de Aristóteles (Lógica: razonamientos). Disp. en: http://www.webdianoia.com/aristoteles/aristoteles_log_3.htm (07-01-11)
La filosofía de Aristóteles (Ética aristotélica). Disponible en: http://www.webdianoia.com/aristoteles/aristoteles_etica.htm (07-01-11)
Filosofía Disponible en http://sied.conalep.edu.mx/bv3/ (07-01-11)
Unidad 3. Interpretación de la Filosofía Moderna y Contemporánea
Resultado de aprendizaje 3.1 Distingue las ideas
principales de la Filosofía Moderna, considerando los planteamientos de Descartes,
Kant, Hegel, Locke y Hume.
Tema 3.1 A
Descripción de los planteamientos de Descartes
El Método La Duda
metódica El Ser Humano, alma y
cuerpo
La Filosofía Moderna
René Descartes (1596-1650)
Nació en La Haye, Francia y
estudió Humanidades, Ciencias y Filosofía Escolástica, en el Colegio de La Flèche,
de los jesuitas. Posteriormente se dedicó a viajar y a escribir.
Su genio lo llevó a la creación
de una nueva ciencia matemática: la Geometría Analítica (Álgebra y Geometría).
Escribió varias obras filosóficas
que lo llevaron a la fama, sobresalen entre ellas: Discurso del método, Meditaciones
Metafísicas, Principios de Filosofía,
y Tratado de las pasiones del alma.
Descartes ha sido el más famoso
genio del Siglo XVII, con él se coloca la primera división respecto al
pensamiento antiguo y medieval, por lo que se le conoce como el “Padre de la
Filosofía Moderna”.
Su idea central es la creación de
un sistema filosófico invencible, perfectamente garantizado en su verdad y en
su orden lógico, de manera similar a lo que sucede en las matemáticas.
El Método
Para evitar el error, no basta la
inteligencia, es necesario saber aplicarla adecuadamente, es decir, se requiere
un método racional, que libere al Hombre de la fácil caída en la equivocación.
En el Discurso del Método, describe
sus famosas cuatro reglas metódicas:
Regla de la evidencia: “No aceptar como verdadero sino lo que es
evidente”. Para ello hay que evitar la prevención y la precipitación. En otras
palabras, sólo se puede poseer la verdad cuando el espíritu capta las ideas con
toda su evidencia, de un modo fácil, inmediato, sereno y claro. Esta evidencia
no puede encerrar la duda y el error.
Regla del análisis: “Dividir cada una de las dificultades que se
van a examinar, en tantas partes como sea posible y necesario para resolverlas
mejor”. Es decir, descomponer las ideas complejas en sus partes más simples, y
además, remontarse a los principios más simples de los que depende aquello que
se está examinando.
Regla de la síntesis: “Conducir por orden los pensamientos,
empezando por los objetos más sencillos, más fáciles de conocer, para subir
gradualmente hasta el conocimiento de los más complejos…” Se trata de una
operación contraria a la anterior, y es su complemento: una vez dividido en
partes un asunto, para su mejor comprensión, es necesario reconstruir el todo,
a partir de os principios encontrados. Esta regla coincide en el área de
Lógica, con la deducción: procedimiento gradual que avanza lógicamente desde lo
simple a lo complejo.
Regla de las enumeraciones y repeticiones: “Hacer enumeraciones tan
completas y revisiones tan generales, como para estar seguro de no omitir
nada”. Con esto se persigue una intuición global del asunto tratado, de manera
que la inteligencia posea y domine la materia desde el principio hasta el fin,
lo que supone la repetición o repaso del camino andado.
La Duda metódica
Una vez establecido el método a
seguir, Descartes se propuso edificar una Filosofía perfectamente estructurada,
al modo de las ciencias matemáticas. Para ello es necesario partir de una
verdad absolutamente indubitable (indudable), y de la cual se pueda derivar
todo el edificio filosófico.
Para encontrar esa primera
verdad, es preciso borrar todo conocimiento que no esté debidamente
fundamentado. Por ello, hay que dudar de todo lo que percibimos con los
sentidos y de todos los conocimientos científicos.
La duda que propone Descartes
tiene como finalidad la fundamentación de la nueva Filosofía sobre bases
indubitables. No se trata de dudar por dudar, sino de una duda metódica, que
sirve como medio o método, para llegar a un principio completamente evidente.
Los motivos que Descartes
justifica para dudar, se fundamentan en tres principales niveles de duda:
Primer nivel. Basado en malas percepciones sensoriales. Como
ejemplo podrás recordar haber conocido a alguien en un “antro”, de noche, y que
te habrá parecido muy guap@; pero posteriormente, cuando volviste a verle a la
luz del día, observaste que tenía defectos que no habías notado al momento de
conocerlo.
Segundo nivel. Similitud entre vigilia y sueño y falta de criterios
para distinguirlos. Como ejemplo te darás cuenta que si presenciaste una clase
cuando no habías dormido bien, a pesar de querer poner atención a ella, hubo
aspectos tratados en la sesión que no recuerdas o no pudiste entender, porque
dicha atención no funcionaba correctamente debido a tu estado de cansancio o
somnolencia. Igual pudo ocurrirte si tenías mucha hambre al momento de
pretender enfocarte en clase.
Tercer nivel. Genio maligno. Puede haber un ser superior, un genio
maligno capaz de manipular nuestras creencias. En realidad no significa que
Descartes creyera que hay un ser superior que nos controla y hace que nos
equivoquemos, sino, que se trata de una metáfora sobre la naturaleza engañosa
del ser humano. Como ejemplo te pudo haber sucedido que estabas profundamente
enamorad@ y no veías –o no querías ver- los defectos, o incluso justificabas el
mal comportamiento de tu “amor”.
El primer principio cartesiano
San Agustín había lanzado con
anterioridad la frase “Si fallor, sum”
(si me equivoco, existo), la cual Descartes toma como base para afirmar su
principio fundamental: “Cogito, ergo sum” (pienso, luego
existo) que en una época en que se hablaba sobre cuestiones existenciales,
relativas a cómo afirmar nuestra existencia, es decir, cómo estar seguros de
que no somos simplemente un sueño o pensamiento de alguien más; basándose en una
intuición básica establece que, toda persona podrá dudar de lo que quiera, pero
no podrá dudar de su propia existencia, porque si duda, es que piensa, y si
piensa, es que existe.
El Ser Humano, alma y cuerpo
En sus Meditaciones Metafísicas, Descartes planteó el problema de la
relación mente-cuerpo en el hombre. Trataba de explicar cómo la conciencia, el
espítiru, la libertad, las ideas, el libre arbitrio, etc., pueden vincularse al
mundo material, al cuerpo del ser humano tal como la ciencia lo describe.
De acuerdo con Descartes, el
cuerpo y la mente son entidades (él las llama substancias) distintas, cuyos
comportamientos son también diversos. La mente está vinculada al acto de
pensar, sin espacio definido, y puede decidir libremente. El cuerpo en cambio,
está situado en el espacio, sin pensamiento, y lo gobiernan las leyes del
movimiento. En su opinión, en cada persona, el cuerpo y la mente están unidos y
cada uno de ellos influye constantemente sobre el otro. Pero ¿cómo puede
afectar la mente al cuerpo, si éste se rige por las leyes naturales y la mente
no? Como respuesta afirma que ambos interactúan en una pequeña glándula situada
en la base del cerebro (glándula pineal), desde la cual la mente rige el
movimiento del cuerpo en su conjunto. Así, el ser humano es una dicotomía
(dualidad) alma-cuerpo.
Nota: La información de René Descartes te servirá para realizar la
evidencia 29 que se pide más adelante, del siguiente filósofo es importante que
analices su información y la reserves para la actividad de la próxima semana.
Tema 3.1 B
Descripción de los planteamientos de Kant
La crítica de la razón pura y la crítica de la razón práctica
La libertad y la inmortalidad del alma
Immanuel Kant
(1724-1804)
Nació y murió en Königsberg,
Prusia.
Kant es uno de los más
importantes filósofos en la historia universal del pensamiento. Su vida la
consagró a la ciencia y a la Filosofía, a la enseñanza y la reflexión, a la
creación de uno de los más originales sistemas filosóficos.
A partir de 1781 publica sus tres
obras centrales: Crítica de la razón Pura,
Crítica de la razón práctica y Crítica del juicio. La Teoría del
Conocimiento, la Ética y la Estética son los correspondientes temas ahí
tratados.
La intención principal de Kant es
una fundamentación original y radical de los conocimientos científicos.
La crítica de la razón pura
De manera similar a Copérnico,
que afirmó por primera vez que, no es el Sol quien gira alrededor de la Tierra,
sino que es ella quien gira alrededor del Sol; en su obra Crítica de la razón pura, Kant refiere que, tradicionalmente se ha
creído que el sujeto cognoscente (que conoce), es el que gira alrededor del
objeto conocido, o sea, es el sujeto el que se rige por las leyes del objeto,
lo cual reduce al conocimiento a ser una simple y copia fiel de la realidad.
Sucede según Kant, que es al revés, el objeto es el que gira alrededor del
sujeto, lo que significa que el sujeto es el que impone sus normas al objeto;
éste se rige por el sujeto y no al revés. Así, la ciencia no es una simple
copia de la realidad, sino una estructuración al modo humano, que realiza el
hombre a partir de los datos de los objetos.
De manera similar, Kant afirma
que, no son los bienes y los fines los que darán categoría moral a la conducta
humana, sino que es la razón (buena voluntad), con sus leyes universales, la
que elevará un acto a nivel moral.
La crítica de la razón práctica
Kant reafirma a la Metafísica en
un nivel diferente al científico, pero no menos valioso. Sostiene que hay una causalidad
libre en el plano de las almas espirituales; respecto al “yo” su
inmortalidad, y, respecto a Dios, su existencia y su infinitud.
Estas tres verdades con el centro
de los principales temas de la Metafísica asentados en la Crítica de la razón práctica. Se trata de tres actos de fe, que no
se basan en razones científicas, sino asentimientos libres que el hombre hace
en función de una justificación o fundamentación completa del hecho moral. Sólo
se sostienen como exigencias de la razón
práctica, aunque no se conozca a la realidad en sí misma.
La libertad y la inmortalidad del alma
Como se explicó en el apartado de
la Crítica de la razón práctica, el
hecho moral sólo se puede dar si hay libertad o autonomía del hombre. Además,
el hecho moral pide la progresividad de ese nivel; esto sólo se da si el alma
humana es inmortal. Y por último, sólo un ser perfecto, como Dios, puede
otorgar la felicidad perfecta al hombre. No es que el hombre deba buscar la
felicidad, sino que el hombre merece la felicidad cuando su conducta tiene
valor moral.
Fuente de consulta:
Gutiérrez Sáenz, R. (2007). Historia de las
doctrinas filosóficas. Naucalpan, Estado de México: ESFINGE.
Para
reforzar el tema, observa el video disponible en el link siguiente, que detalla
la información:
Nota: Te recuerdo que en la parte superior de esta página, se
encuentra una liga con la que puedes acceder al contenido de la Guía pedagógica
del módulo.
Es momento de realizar en equipo
las evidencias 27 y 29 de tu Guía Pedagógica del módulo (consulta el
índice):
Para la evidencia 27 consulta la Actividad
10. Interpretación de las ideas principales de la filosofía de René
Descartes, de tu Guía Pedagógica y
posteriormente, realiza lo siguiente:
Lee detenidamente las frases de René Descartes que se presentan enseguida
(observa el ejemplo).
Redacta en un archivo de Word una interpretación para cada una de ellas.
Frases
de René Descartes
“Para investigar la verdad es
preciso dudar, en cuanto sea posible, de todas las cosas.”
“Pienso, luego existo.”
“Daría todo lo que sé, por la
mitad de lo que ignoro.”
“Dos cosas contribuyen a avanzar:
ir más deprisa que los otros o ir por el buen camino.”
Ejemplo:
“Daría todo lo que sé, por la
mitad de lo que ignoro.”
Significa para mí que, debido a que comprendo cuán
inmenso es el conocimiento, fácilmente renunciaría o borraría todo lo que hasta
hoy he aprendido, si a cambio obtuviera sólo la mitad del conocimiento de todo
lo que aún me falta por aprender.
Nombra tu trabajo como EVIDENCIA 27
Para la evidencia 29 Actividad de coevaluación, consulta el Instrumento de Coevaluación situado en
las páginas 88-91 de tu Guía Pedagógica, y posteriormente, pide
a cualquier otro compañero que evalúe tu desempeño en este módulo (otro te
califica a ti y viceversa), para ello:
Coloca en la parte
correspondiente del Instrumento, tus datos: nombre, carrera, nombre del módulo,
semestre y grupo.
Pide a otro compañero que en las
tablas siguientes, califique tu desempeño en este módulo, colocando una ü en la columna que corresponda a tu trabajo y actitudes (puede
colocar sólo una ü
respecto a cada indicador, es decir, sólo puedes haberte desempeñado hasta el
momento “Con frecuencia”, “Algunas ocasiones” o “Nunca”, pero únicamente sólo
uno de ellos).
Pide a tu compañero que en la
página inicial (88), coloque debajo del título “INSTRUMENTO DE COEVALUACIÓN” que aparece en la
parte superior, la leyenda: Evaluó: nombre, por ejemplo, si yo te califiqué,
deberé poner como leyenda:
Evaluó:
Itzamaray Aguirre
Escojan de su equipo sólo un Instrumento de coevaluación,
tómenle fotos y péguenlas en un archivo de Word.
Guarden el archivo con el nombre
EVIDENCIA 29
Una vez realizadas las
actividades en equipo, envía en un sólo
mensaje ambos archivos al correo laura.aguirrep@conalepgto.edu.mx
La fecha
límite de entrega es el próximo viernes 08 de mayo.
No olvides incluir en cada archivo el grupo al que
perteneces y el nombre de todos los integrantes del equipo, comenzando por sus
apellidos.
Te recuerdo que un sólo integrante es quien debe
enviar el correo con las evidencias
Para cualquier duda, utiliza la
aplicación Messenger de tu grupo.
Espera la información e
instrucciones para la próxima semana (11 de mayo de 2020).
Tema 3.1 C
Descripción de los planteamientos de Hegel
Tema 3.1 D
Descripción de los planteamientos de Locke
Tema 3.1 E
Descripción de los planteamientos de Hume
El neopositivismo
Tema 3.1 C
Descripción de los planteamientos de Hegel
Lógica Filosofía
de la naturaleza Filosofía del
espíritu
Jorge Guillermo Federico Hegel (1770-1831)
Nace en Stuttgart y muere en
Berlín, Alemania.
Sus principales obras son: Fenomenología del espíritu, La ciencia de la Lógica, Enciclopedia de las ciencias filosóficas
y Filosofía del Derecho.
Representa el máximo exponente
del idealismo germano: conocedor de Teología, Filosofía y de todo saber
cultural, la obra de Hegel es la expresión enciclopédica del conocimiento hasta
su época.
La lógica y el absoluto
Cualquier ente individual que
captemos, sensible o intelectualmente, no es otra cosa sino un momento o fase
de la evolución del Absoluto. Todo cuanto existe es constituyente del Absoluto,
de manera que éste deja de ser algo trascendente o separado del mundo, para
venir a ser la totalidad sintética de todos los entes.
En consecuencia, el Absoluto no
está acabado, está en proceso de evolución, es la evolución misma de las cosas.
Pero además, la naturaleza íntima de ese absoluto es la Idea o Espíritu. Todo comienza
con la evolución o desarrollo de la Idea, y así es como se produce aun en el
mundo material. El producto supremo de esa evolución es el hombre, en donde
toma conciencia de sí misma la Idea que evoluciona.
La lógica hegeliana podría equivaler
a una metafísica, puesto que las categorías metafísicas-aristotélicas y
kantianas, forman parte de su estructura. Puede aceptarse siempre que
entendamos por metafísica una ontología del ser en tanto ser, pero también de
la physis: naturaleza, y lo más
específico del espíritu.
La lógica de Hegel más que una
ontología (estudio del ser), es una historia o genealogía del ser, que no se
reduce a un discurso cronológico y lineal, sino que cada momento conserva los
anteriores y los supera. El último momento, la Idea Absoluta no es el final de
una secuencia, sino la totalidad en la que se fundamentan los momentos
anteriores.
La dialéctica
Posiblemente la teoría más famosa
de Hegel es la dialéctica, que se aplica a todo ente finito (limitado). Debe
entenderse como la ley universal del devenir
(cambio), e inclusive, como el mismo proceso de cambio. Se aplica a todo ente –espiritual
o material; nuestro modo de pensar es dialéctico, y lo mismo la historia del
pensamiento, y los cambios de los cuerpos físicos.
La evolución tiene lugar por contradicción. Cada ente por ser finito,
lleva en sí mismo el germen de su propia negación. La dialéctica no es otra
cosa sino la tensión que hace saltar esos límites del ente finito, para dar por
resultado otro ente, en cierto modo opuesto al anterior, contrario en cuanto
que presenta características que el primero no manifestaba positivamente. La misma
tensión (o exigencia de ser) logra la asimilación o superación de los
contrarios en un nivel o etapa superior. Ésta es la síntesis, resultado de la evolución de la tesis y la antítesis.
Lo más importante de este
proceso, es que la evolución se concibe, no como un dejar atrás al pasado, sino
como una ascensión en donde el pasado toma parte, pero en un nivel superior. Con
justa razón se llama síntesis a esta
etapa final del devenir.
La fenomenología y la alienación
En su Fenomenología del espíritu, Hegel lanza el concepto de Fenomenología,
como la descripción de la evolución de una conciencia en particular, desde que
tiene conocimiento sensible, hasta que llega a posesionarse de sí misma, en esa
toma de conciencia que caracteriza al hombre (el conocimiento de su propio yo),
y se logra, al final, la síntesis
absoluta de todo el Espíritu.
En dicha obra aparece además el
concepto de “alienación”. La conciencia (ser para sí), se aliena, según Hegel, cuando
capta su objeto (ser en sí), entonces se pierde en él, se extasía en los
hallado, sale de sí misma, y pierde su propio ser. Sólo en una etapa posterior,
por medio de la reflexión, la conciencia se recupera a sí misma, y logra la
síntesis del ser-en-sí-para-sí. Esta idea constituye una de las bases del
marxismo (se analizará más adelante), con aplicaciones en Economía y Religión.
También Sartre toma esta idea de Hegel para definir al hombre, y para deducir
la imposibilidad de la existencia de Dios (se analizará con posterioridad).
Filosofía de la naturaleza
La Idea en tanto Idea, no es más
que “idealidad”, no es nada real sino algo abstracto que aún no alcanza su
existencia o realidad. La Idea no tiene realidad más que en el pensamiento de
los hombres que la piensan. Así la Idea es algo abstracto, es el ser-en-sí, un
reino de leyes, un mundo de formas sin entidad, y justamente por ello no es por
sí ni puede serlo, sino sólo en identidad con la realidad del mundo”. La Idea
también es de índole dialéctica, es la totalidad del pensamiento desplegado en
toda su riqueza; y en tanto se trata de una totalidad dialéctica, requiere a su
vez su total negación, de manera que por sí misma es insuficiente y exige su
opuesto. En tanto la Idea a de conocerse a sí misma, también tendrá que ser
objeto para sí misma, tendrá que objetivarse. Y como fuera de la Idea no hay
nada, tiene que ser esta misma la que “produzca” la realidad, poniendo ante
todo la naturaleza.
La naturaleza en su raíz es
pensamiento, Idea, pero no lo “sabe”, su esencia le es ignorada, por así
decirlo, a las piedras, plantas y animales, y sin embargo todos están sometidos
a leyes, por tanto a algo que no es naturaleza, sino razón, pensamiento.
Lo característico de la
naturaleza reside en el ser-fuera-de-sí, en la “exterioridad”. Aquel “fuera”
indica que en la naturaleza cada cosa es exterior a otra, que este campo es el
dominio del espacio, donde las manifestaciones tienen forma por su recíproco
ser mutuamente externo, donde las cosas son exteriores las unas a las otras.
La naturaleza posee una serie
dialéctica. La naturaleza recorre diversos momentos que se agrupan en tres
grandes secciones: la mecánica, la física (físico-química) y la orgánica. La
primera corresponde a las categorías de cantidad donde se estudia el espacio y
su negación, que es el tiempo y el movimiento como síntesis de ambos; la física
corresponde a las categorías de cualidad donde se estudian los elementos, la
cohesión, el sonido, la luz, el calor, el quimismo, etc.; y por último la
orgánica que se ocupa de los seres vivos.
Es recomendable comprender estos
momentos como peldaños o grados, cada uno de los cuales suponen los anteriores.
Hegel afirma:
“La naturaleza ciertamente ha de
considerarse como un sistema de grados, cada uno de los cuales proviene
necesariamente de los anteriores (los géneros superiores de los inferiores),
pero no como si uno fuese producido naturalmente de los otros, sino en la idea
interior que constituye el fundamento de la naturaleza. La metamorfosis
corresponde sólo al concepto como tal, pues la modificación de este solamente
es desarrollo”
Filosofía del espíritu
La Idea constituye el fondo y
fuerza operante de la naturaleza, porque la realidad tiene que responder a la
organización dialéctica de la Idea. La Idea constituye el principio que le da
unidad y estructura, realidad y movimiento.
La realidad es en su
manifestación más plena, espíritu, y el espíritu es reflexión, retorno sobre sí
mismo, conciencia. De manera que la Idea representa el en-sí y la naturaleza el
fuera-de-sí, es decir, tesis y antítesis, se requiere ahora de una síntesis que
será el retorno de la Idea sobre sí misma. De esta manera la Idea que se ha
alineado con la naturaleza, tiene que iniciar su retorno hacia sí misma, hacia
su interioridad misma. Y este retorno, que tiene lugar en el hombre, es lo que
se denomina espíritu: el proceso de la Idea que se va encontrando a sí misma,
la recuperación de la Idea.
El espíritu es “la Idea en acto, que
se sabe a sí misma, el espíritu viviente que de modo necesario se diferencia a
sí mismo y que retorna a la unidad consigo mismo a partir de sus
diferenciaciones”. El espíritu no es “cosa, substancia, sino actividad,
proceso, mejor dicho, “movimiento”, devenir. No es nada hecho ni nada uniforme
sino que el espíritu es un proceso eterno de diferenciación, de auto-diferenciación.
Lo característico del espíritu se
encuentra en la interioridad y en la libertad. “Todas las actividades del
espíritu –dice Hegel- no son sino diferentes modos de reducción de lo externo a
la interioridad que el espíritu mismo es, y sólo merced a esta reducción,
merced a esta idealización o asimilación de los exterior, se transforma en
espíritu y es espíritu”. En cuanto a la libertad el espíritu es libre porque no
depende más que de sí mismo, porque únicamente depende de sí mismo y es
independiente de todo lo otro.
Con el espíritu se llega entonces
a la suprema forma de la realidad, de lo absoluto mismo en toda su plenitud:
“Lo Absoluto es el espíritu: ésta es la suprema definición de lo absoluto”.
Desde este punto de vista el espíritu puede identificarse con Dios y así
resulta que la filosofía y la religión “tienen por objeto suyo la Verdad, y por
cierto que en sentido supremo –en cuanto que Dios es la verdad y Él sólo es la
verdad”.
El espíritu es interioridad y
libertad, retorno sobre sí mismo y autosuficiencia pero esto lo es sólo según
su concepto, es decir, en-sí, potencialmente, pero no lo es inmediato para sí,
vale decir, en acto. Para llegar a ser (en acto) lo que es (en potencia), el
espíritu tiene que hacerse así mismo. De manera que si el espíritu es Dios,
éste se trata de un Dios in fieri, es
decir, un Dios que tiene que hacerse a sí mismo lo que es (tal como una semilla
tiene que hacerse árbol para alcanzar su propio desarrollo), por medio de la
naturaleza, a través de los hombres, de la historia de los pueblos, de las
distintas manifestaciones del arte, a través de las religiones, y, por último,
de la historia de la filosofía.
Resulta pues que, a lo largo de
su marcha, el espíritu tiene que recorrer diversas etapas, dependiendo el ritmo
dialéctico puesto por la Idea. Estas etapas tienen tres grandes divisiones: el
espíritu subjetivo, el espíritu objetivo y el espíritu absoluto.
Tema 3.1 D
Descripción de los planteamientos de Locke
Contexto histórico Biografía Principales ideas: la experiencia
como fuente del conocimiento, sensación y reflexión, las ideas complejas y
clases de conocimientos
John Locke (1632-1704)
Biografía
Nace en Bristol y muere en High
Laver, Inglaterra.
Fue un médico y filósofo inglés
considerado como el padre del empirismo y del liberalismo político, y uno de
los pensadores más influyentes de la Ilustración europea y de la
Constitución de los Estados Unidos.
Sus actividades alcanzaron una
diversidad de campos, tales como la Medicina, el magisterio, la política y la
Filosofía. Su trabajo también influyó en el desarrollo de la epistemología, de
la tolerancia religiosa y de la teoría del contrato social.
Alcanzó su fama a través de
sus Ensayos Filosóficos, que sirvieron de base al pensamiento político
liberal y de inspiración para la Constitución de los Estados Unidos. También criticó
el sistema educativo de la época, donde abundaba el castigo corporal.
Entre sus principales obras,
destacan: Ensayo sobre el entendimiento
humano, Cartas sobre la tolerancia,
Ensayo sobre el gobierno civil y Pensamientos sobre la educación.
En el terreno político, estuvo mezclado
en los acontecimientos ingleses de su tiempo.
Contexto histórico
En la época de Locke, estaban
sucediendo en Inglaterra, cambios en el aspecto intelectual, económico, social
y político. Los eventos que ocurrieron durante la vida de Locke incluyen
la Restauración inglesa, la Gran Peste y el Gran Incendio de Londres. No alcanzó
a presenciar el Acta de Unión de 1707, aunque se mantuvieron los tronos de
Inglaterra y Escocia en unión personal durante toda su vida.
Principales ideas: la experiencia como fuente del conocimiento,
sensación y reflexión, las ideas complejas y clases de conocimientos
La experiencia como fuente del conocimiento
Locke entiende por idea, al igual
que Descartes, todo contenido mental. Si no puede haber ideas innatas, y parece
innegable que poseemos contenidos mentales a los que llamamos ideas ¿de dónde
proceden tales ideas? Sólo pueden proceder de la experiencia, nos dice Locke.
La mente es como una hoja en blanco sobre la que la experiencia va grabando sus
propios caracteres: todos nuestros conocimientos proceden de la experiencia o
derivan, en última instancia, de ella.
Existen dos tipos de experiencia.
Una experiencia "externa", que nos afecta por vía de la sensación,
y una experiencia "interna", que lo hace mediante la reflexión.
La sensación y la reflexión son, pues, las dos formas de experiencia de las que
derivan todas nuestras ideas.
Supongamos, entonces, que la
mente sea, como se dice, un papel en blanco, limpio de toda inscripción, sin
ninguna idea. ¿Cómo llega a tenerlas? ¿De dónde se hace la mente con ese
prodigioso cúmulo, que la activa e ilimitada imaginación del hombre ha pintado
en ella, en una variedad casi infinita? ¿De dónde saca todo ese material de la
razón y del conocimiento? A esto contesto con una sola palabra: de la
experiencia; he allí el fundamento de todo nuestro conocimiento, y de allí es
de donde en última instancia se deriva. Las observaciones que hacemos acerca de
los objetos sensibles externos o acerca de las operaciones internas de nuestra
mente, que percibimos, y sobre las cuales reflexionamos nosotros mismos, es lo
que provee a nuestro entendimiento de todos los materiales del pensar. Esta son
las dos fuentes del conocimiento de donde dimanan todas las ideas que tenemos o
que podamos naturalmente tener.
Sensación y reflexión
La sensación es la principal fuente de las ideas. Los sentidos
"transmiten a la mente", dice Locke, distintas percepciones, según el
modo en que los objetos les afectan (colores, olores, movimiento, figura, etc.)
produciendo en ella las ideas correspondientes. La reflexión, aunque no tan desarrollada y generalizada como la
sensación, nos permite tener experiencia de nuestras actividades mentales
(percepción, pensamiento, memoria, voluntad, etc.) lo que da lugar también a la
creación de las ideas correspondientes. Pero además, la combinación de la
sensación y la reflexión pueden dar lugar a la creación de nuevas ideas, como
las de existencia, placer y dolor, por ejemplo.
Las ideas complejas
Las ideas pueden ser simples y
complejas. Las ideas simples son recibidas por la mente directamente
de la experiencia (sensación o reflexión) de forma enteramente pasiva, y pueden
ser consideradas los "átomos de la percepción", a partir de los
cuales se constituyen todos los demás elementos del conocimiento. Las ideas complejas, aunque derivan de la experiencia, son formadas por la
mente al combinar ideas simples, por lo que ésta adquiere un papel activo en la
producción de tales ideas complejas (como las ideas de belleza, gratitud,
universo, etc.). Las ideas complejas puede ser de tres clases: de modos, de
sustancias y de relaciones. Pero todas ellas, por alejadas que puedan parecer
de los datos de la experiencia, son elaboradas por la mente a partir de la
comparación y la combinación de ideas simples.
Clases de conocimientos
Las ideas son contenidos
mentales, aunque procedan o deriven de la experiencia. Siendo el conocimiento
una operación del entendimiento, los objetos inmediatos sobre los que ha de
versar serán las ideas (contenidos mentales) y no las cosas. Así, el
conocimiento consistirá en ciertas operaciones que realizamos con las ideas,
operaciones que se refieren a la capacidad que tenemos de percibir la conexión
y el acuerdo o desacuerdo entre ellas: "El conocimiento es la percepción
del acuerdo o desacuerdo de dos ideas". El entendimiento no puede acceder
a las cosas, sino sólo a sus propios contenidos mentales, las ideas. El
conocimiento pues, no podrá consistir en el acuerdo o desacuerdo entre las
ideas y las cosas, como mantenía la interpretación aristotélica, sino en el
acuerdo o desacuerdo de las ideas, es decir, entre los contenidos mentales a
los que tiene acceso.
Locke distingue tres niveles o tipos de conocimiento: el intuitivo, el demostrativo y el sensible.
El conocimiento intuitivo se da cuando percibimos
el acuerdo o desacuerdo de las ideas de modo inmediato, a partir de la
consideración de tales ideas y sin ningún proceso mediador: "... a
veces la mente percibe de un modo inmediato el acuerdo o desacuerdo de dos
ideas por sí solas, sin intervención de ninguna otra; y a esto, creo, puede
llamarse conocimiento intuitivo". Lo que percibimos por intuición no está
sometido a ningún género de duda y Locke considera que este tipo de
conocimiento es el más claro y seguro que puede alcanzar la mente humana. Como
ejemplo claro de conocimiento intuitivo, Locke propone el conocimiento de
nuestra propia existencia, que no necesita de prueba alguna ni puede ser objeto
de demostración, siguiendo claramente la posición cartesiana sobre el carácter
intuitivo del conocimiento del "yo".
El conocimiento demostrativo es el que obtenemos
al establecer el acuerdo o desacuerdo entre dos ideas recurriendo a otras que
sirven de mediadoras a lo largo de un proceso discursivo en el que cada uno de
sus pasos es asimilado a la intuición. El conocimiento demostrativo sería,
pues, una serie contínua de intuiciones (como el conocimiento deductivo en
Descartes), al final de las cuales estaríamos en condiciones de demostrar el
acuerdo o desacuerdo entre las ideas en cuestión, y se correspondería con el
modelo de conocimiento matemático.
El conocimiento sensible es el conocimiento de las
existencias individuales, y es el que tenemos del Sol y demás cosas, por
ejemplo, cuando están presentes a la sensación. No deja de resultar
sorprendente que Locke añada esta forma de conocimiento a las dos anteriores, a
las que considera las dos únicas formas válidas de conocimiento: "al
margen de las cuales sólo es posible tener fe u opinión". El conocimiento
sensible, sin embargo, nos ofrece el conocimiento de cosas, de existencias
individuales, que están más allá de nuestras ideas.
Las demás supuestas formas de
"conocimiento" no pasarán de ser una mera probabilidad: "la
probabilidad es la apariencia del acuerdo de las ideas, sobre pruebas falibles",
o serán englobadas en el ámbito de la fe, es decir, en lo que no es
conocimiento: "La fe, en cambio, es el asentimiento que otorgamos a
cualquier proposición que no esté fundada en deducción racional”.
Tema 3.1 E
Descripción de los planteamientos de Hume
Contexto histórico Biografía Principales ideas: Las percepciones
y las ideas
David Hume (1711-1776)
Biografía
Hume nació y murió en Edimburgo,
Inglaterra.
Nacido en el seno de una familia
emparentada con la aristocracia, aunque de modesta fortuna, David Hume estudió un
tiempo, leyes en la Universidad de Edimburgo por voluntad de su familia, pero
su falta de interés lo llevó a abandonar la carrera y verse obligado a buscar
la manera de ganarse la vida.
Sus obras principales son: Tratado de la naturaleza humana e Investigación sobre el entendimiento humano.
Hume fue el autor que llevó al
empirismo hasta sus últimas consecuencias. Después de él, difícilmente se puede
añadir algo nuevo a esta corriente.
Contexto histórico
Hume vive en un contexto
histórico que reclama una nueva teoría del conocimiento: Europa aún estaba
inmersa en el Antiguo Régimen, que no finalizará hasta la Revolución Francesa
de 1789. La monarquía absoluta era la constante como forma de organización
política, pero se habían producido algunos avances; por ejemplo, la
administración se había centralizado y vuelto más eficaz. La Iglesia católica
continuaba ocupando un papel primordial en el reparto de poder y la economía
seguía siendo feudal, aunque ya se empezaban a ver indicios de un nuevo modelo
económico: el capitalismo.
Tras la revolución de 1688,
Inglaterra y, poco después, toda Gran Bretaña, inició un camino hacia el
constitucionalismo que la convirtió durante el siglo XVIII en un modelo para
los ilustrados del resto de países.
También se enfrentaron al poder
eclesiástico, que seguía ejerciendo una gran influencia (el mismo Hume no pudo
acceder a una cátedra universitaria por la oposición de la Iglesia escocesa.
El siglo XVIII es un momento de
la historia en donde se empezaba a fraguar el fin de la Europa que había
surgido con Carlomagno. Se proclaman los derechos del hombre. Se lucha contra
los privilegios de unos pocos.
Los cambios más importantes en
Inglaterra tienen lugar durante el reinado de Jorge III (1760-1820).
Principales ideas: Las percepciones y las ideas
Para Hume todo contenido de la
mente se divide en impresiones (percepciones) e ideas.
Hume llama impresión o percepción a todo lo que podemos
encontrar en la mente, tanto a los objetos de nuestras vivencias
(como las sensaciones, los sentimientos, las pasiones o los pensamientos)
como a las vivencias mismas (a los propios actos de percepción, pensamiento,
sentimiento o voluntad).
Por un lado tenemos las
impresiones, que son los datos inmediatos de la experiencia y aquellas
percepciones que poseen el mayor grado de fuerza y vivacidad (oír, ver, oler,
sentir, amar, desear, querer, odiar), son impresiones.
Las ideas, el otro tipo de percepción,
son copias, imágenes o
representaciones mentales de impresiones anteriores. Por eso su grado de fuerza
y vivacidad es menor.
Si uno pasea distraído por la
calle y se lleva un pisotón
doloroso está teniendo una impresión.
Su grado de fuerza y vivacidad es incuestionable: el pie nos duele. Ahora bien,
si uno llega a casa, pasado un tiempo, y recuerda el pisotón y el dolor: eso es tener
una idea. Por supuesto, no puede compararse el grado de fuerza y vivacidad del pisotón real con el ideado después, por mucha fidelidad que
tenga nuestro recuerdo.
Las ideas son siempre
copias, y por lo tanto han de derivarse de impresiones precedentes. Las
impresiones son el origen de nuestras ideas.
Fuentes de consulta:
Gutiérrez
Sáenz, R. (2007). Historia de las doctrinas filosóficas. Naucalpan,
Estado de México: ESFINGE.
Para
reforzar el tema, observa los videos disponibles en los link siguientes, que detallan
la información:
Nota: Te recuerdo que en la parte superior de esta página, se
encuentra una liga con la que puedes acceder al contenido de la Guía pedagógica
del módulo.
Es momento de realizar en equipo
las evidencias 31, 32 y 33 de tu Guía Pedagógica del módulo (consulta el índice de la misma):
Para la evidencia 31
consulta la Actividad 11. Interpretación
de la evolución del concepto “sujeto” dentro del idealismo alemán, de tu Guía Pedagógica y
posteriormente, considera la extensión que se pide y realiza lo siguiente:
Realiza la lectura del texto
“El idealismo alemán visto por Manuel García Morente” y realiza lo que se te
pide.
Texto
disponible en tus copias de la Guía y en:
En base al texto, en un archivo de Word, responde las
siguientes cuestiones:
1. ¿Cuál es el error de Descartes en su concepción del sujeto?
2. ¿De qué forma resuelve Kant este problema?
3. ¿Cuál es la nueva idea que introduce Kan en la filosofía capaz
de cambiar la producción del conocimiento en la ciencia?
4. ¿Cuál es el rasgo de la filosofía de Kant que lo distingue de
sus predecesores y sucesores?
5. ¿De qué manera introduce Kant la idea de “lo absoluto” en la
filosofía?
6. ¿De qué forma conciben “lo absoluto” Hegel?
7. ¿Cuál es método filosófico que siguen los tres filósofos
anteriores y en qué consiste?
8. ¿Qué es “el absoluto” para Hegel?
9. Explica el desdoble de la razón en tesis, antítesis y síntesis.
10. ¿Cuál es el punto de partida de toda la filosofía hegeliana?
11. ¿Qué
significa la afirmación de Hegel “Todo lo real es racional y todo lo racional
es real”?
Para la evidencia 32
que corresponde a la Actividad Núm. 12
“Interpretación de las ideas principales del positivismo y neopositivismo, de
tu Guía Pedagógica, efectúa lo siguiente:
- Investiga en fuentes de información confiable ¿En qué consisten las corrientes filosóficas del positivismo y del neopositivismo? En base al contenido de tu investigación:
- Escribe en un archivo de Word y con tus propias palabras, en qué consiste:
El neopositivismo
- Posteriormente, explica por qué razones estás a favor o en contra (asume una postura), de las siguientes afirmaciones:
“El método
científico es el único método valido para la obtención de conocimiento”
“Sólo son
ciencias las ciencias naturales”
“La lógica
interna de la ciencia es ajena a factores sociales"
- Escribe dos o tres ejemplos de situaciones que le den fortaleza y solidez a tu postura. Te ejemplifico una afirmación:
“Sólo son
ciencias las ciencias naturales”
Estoy en contra de esta idea,
puesto que las matemáticas (1) y la lógica (2), son dos claros ejemplos de
ciencias válidas y formales.
Para la evidencia 33
consulta la Actividad de Evaluación
3.1.1 “Elabora un ensayo de las ideas principales de la filosofía moderna
considerando los planteamientos de Descartes, Kant, Hegel, Locke y Hume”, cuya
rúbrica se encuentra en las páginas 98 y 99 de tu Guía Pedagógica y posteriormente, considera la extensión que se
pide y realiza lo siguiente:
En un archivo de Word, redacta un
ensayo con una extensión de 3 cuartillas, con las características siguientes:
Identifica y explica las
principales ideas de Descartes, Kant, Hegel, Locke y Hume.
Adopta
y expresa tu postura personal ante las ideas de Descartes, Kant, Hegel, Locke y Hume (ésta
puede ser tu conclusión).
Tu ensayo debe contener:
Introducción, desarrollo,
conclusión, carátula y bibliografía.
Aplicación de las reglas
ortográficas y de redacción.
Notas y referencias
bibliográficas.
Evidencia de creatividad y
claridad en los conceptos expresados.
Una vez realizadas las
actividades en equipo, nombra tus
archivos como EVIDENCIA31, EVIDENCIA32 y EVIDENCIA33 respectivamente, envía en un sólo mensaje los tres archivos
al correo laura.aguirrep@conalepgto.edu.mx
La fecha
límite de entrega es el próximo viernes 15 de mayo.
No olvides incluir en cada archivo el grupo
al que perteneces y el nombre de todos los integrantes del equipo, comenzando
por sus apellidos.
Te recuerdo que un sólo integrante es quien
debe enviar el correo con las evidencias
Para cualquier duda, utiliza la
aplicación Messenger de tu grupo.
Espera la información e instrucciones para la
próxima semana (18 de mayo de 2020), que dará inicio con el contenido del tema
3.2. Resultado de aprendizaje 3.2 Distingue las ideas principales de la Filosofía Contemporánea, considerando los planteamientos de Marx, Nietzsche, Sartre, y Heidegger, y la perspectiva contemporánea de Lyotard.
Filosofía contemporánea
Tema 3.2 A
Descripción de los planteamientos de Marx
El Materialismo La
Ideología El Sujeto histórico La lucha de clases
Karl Marx (1818-1883)
Pensador
socialista y activista
revolucionario de origen alemán. Marx procedía de una familia judía de clase
media. Estudió en las universidades de Bonn, Berlín y Jena, doctorándose en
Filosofía por esta última en 1841.
Su
vida fue muy agitada, pues a cada ciudad que iba (Bonn, Bruselas, Londres,
París), inmediatamente trataba de publicar sus escritos revolucionarios, que
molestaban a la autoridad civil, y en no pocos casos, la expulsión del país.
Trabó
estrecha amistad con Federico Engels, colaborador en muchas de sus obras. Las
principales son: El Capital, Manifiesto del Partido Comunista, Ideología alemana, La Sagrada Familia, y Escritos
Económico-Filosóficos.
El
pensamiento de Marx, está claramente influenciado por Hegel, de quien tomó el
método dialéctico, pero aplicado a la materia y no al espíritu.
La
doctrina de Marx es un materialismo
dialéctico, que ha servido de base para las revoluciones comunistas.
El Materialismo
El punto de partida del
materialismo marxista es la pregunta: ¿Qué es primero, la materia o el
espíritu? Cuya respuesta es que la materia es lo primero, y que el espíritu es
un producto (refinado) de la materia, lo que constituye una opinión
contrapuesta a la Filosofía idealista.
Los marxistas no niegan el
pensamiento, la cultura, la belleza y la inteligencia, pero todo lo espiritual
es un derivado de la materia. La materia es el ser objetivo, que existe
independientemente de la conciencia, se capta por los sentidos y produce
nuestros conocimientos. La conciencia y el pensamiento son inmateriales, pero
en el fondo, constituyen una propiedad y un producto de la materia.
Los materialistas rechazan la
existencia de un espíritu puro (Dios) que es el creador de todo lo existente
(materia): “No es Dios quien ha creado a la materia, sino que es el cerebro
humano (materia), el que ha creado la idea de Dios.
La dialéctica
Marx estuvo fuertemente
influenciado por el pensamiento de Hegel, sobre todo en el método dialéctico
que es la ley fundamental del devenir
(cambio) de la materia.
El materialismo de Marx es diferente
de otros materialismos (estáticos y mecanicistas), al ser dinámico y evolutivo,
considera a la materia en un continuo devenir: materialismo dialéctico.
La dialéctica es la ley del
cambio de la realidad, que tiene lugar de acuerdo con las tres etapas
hegelianas: tesis, antítesis y síntesis.
Una primera etapa de cualquier proceso evolutivo recibe el nombre de tesis; ahí mismo está contenido un
contrario, que poco después se manifiesta con mayor énfasis: la antítesis; enseguida, la lucha de esos
dos contrarios provoca una tercera etapa, que es la síntesis, o “negación de la negación”.
La aplicación más importante de
estas etapas dialécticas (de cambio), está en la interpretación del devenir
histórico como una continua “Lucha de clases”.
La Ideología
Para Marx, la ideología se divide
en un aspecto epistemológico y otro sociológico. El concepto epistemológico (negativo), aborda
cuestiones que tienen que ver con nuestro conocimiento del mundo y señala que
la ideología es una conciencia falsa, invertida, ilusoria, distorsionada o
mistificadora de la realidad, que sirve para ocultar, mantener y legitimar todo
tipo de relaciones de dominio. En cambio, el concepto sociológico (neutro), indica que la ideología es una concepción que
tienen los sujetos sobre el mundo y que los impulsa a actuar para transformarlo.
En otras palabras, Marx señaló que la ideología es algo negativo en la
sociedad, pues impedía que los hombres pudieran alcanzar una concepción
verdadera de la realidad, y porque servía para que se reprodujeran las
relaciones sociales de explotación que convenían a una clase dominante; aunque
también expresó una concepción neutra de la ideología, dado que ésta, lejos de
ser una venda en los ojos, puede servir a las clases dominadas para tomar conciencia
verdadera de su propia situación e intereses, y como guía para su práctica
política emancipatoria (liberadora).
El Sujeto histórico
El Manifiesto del Partido Comunista pone especial atención en torno a
las características originarias de formación, los rasgos estructurales, la
función social e histórica, los procesos de ampliación y toma de conciencia del
sujeto sociopolítico de los cambios y transformaciones en la abolición y
superación del capitalismo.
Esta obra trata del sujeto
revolucionario y su papel histórico. Ese sujeto recorre el mundo como un
fantasma, como un mito cuya función es meter miedo y convocar la defensa
alarmada de los privilegiados. Existe como un no sujeto, como una realidad
simbólica hueca que encarna, por sí sola, el mal. Aun así, la modernidad
burguesa lo teme y lo conjura.
Esa enajenación global, inducida
por todos los reaccionarios de todos los rincones del mundo, de pronto requiere
construir su propia realidad, desarrollar una identidad teórica y
político-práctica compatible con los hechos, que lanza al escenario histórico a
seres humanos reales, surgidos de las entrañas del capitalismo y, a la vez, sus
verdaderos opositores estructurales.
La lucha de clases
Marx observó que la sociedad
siempre ha tenido clases sociales en pugna (lucha): la burguesía (los ricos o dueños del capital) y el proletariado (los obreros o trabajadores);
según el predominio de una clase u otra, se encuentran la tesis y la antítesis.
La lucha armada acelera el proceso evolutivo, y se logra la síntesis.
En toda sociedad siempre han
existido estas clases sociales y siempre han estado en contante lucha por su
predominio y poder sobre la otra… esta lucha constante es lo que motiva el
cambio o evolución… el Motor de la
Historia es la Lucha de clases.
La praxis
Praxis es lo mismo que acción o práctica. De acuerdo con Marx, no
debe quedarse en la mera contemplación o en la teoría, aseguraba que “Los
filósofos hasta ahora, sólo han contemplado al mundo; lo que se requiere es
transformarlo”. Marx buscaba superar y conservar la teoría filosófica, la
acción que proponía, era una acción guiada por la idea, conservando la teoría
pero en un plano superior: llevándola a la práctica. Así, traspasando a lo
netamente filosófico, la praxis se
coloca en un criterio de verdad, de manera que una proposición (afirmación o
negación), es aceptada como verdadera, cuando es sometida a la comprobación de la
práctica.
La alienación
Una alienación en general, es lo
mismo que enajenación, o supresión de algún aspecto de la personalidad humana. El
marxismo pretende salvar al hombre de las alienaciones que sufre: lograr que el
hombre viva sin las explotaciones, opresiones y tiranías a las que ha sido
sometido a lo largo de la historia. Entre todas las alienaciones,
tienen lugar importante la religiosa y la económica.
La alienación religiosa según el marxismo, consiste en la elaboración
mental de la idea de Dios a partir de lo mejor que tiene el hombre, para luego “hipostasiar”
(considerar algo como verdad absoluta) dicha idea, es decir, conferirle
existencia real, y posteriormente, vivir sometido a la pseudolegislación
(falsas leyes) originadas en tal Dios, cuya existencia se cree real y
verdadera.
Así, para Marx: no es Dios quien
crea al hombre a su imagen y semejanza, sino al revés, Dios es una invención del
hombre, y lo crea para obtener tranquilidad espiritual, para darle sentido a su
existencia, para tener a quién recurrir en caso de necesitarlo… pero Dios y la
religión terminan por doblegarlo y no permitir que realice aquello para lo que
fue creado, porque el hombre vive alienado, no es libre de decidir y disfrutar
su vida plenamente porque las normas religiosas lo limitan y lo condenan.
Respecto a la alienación
económica, la propaganda comunista delata la explotación de la que son objeto
los trabajadores por parte de los capitalistas. Esa explotación por la que el trabajador
es menospreciado de sus derechos, y obligado a vivir materialmente en un nivel
infrahumano.
Tema 3.2 B
Descripción de los planteamientos de Nietzsche
Crítica a la Metafísica Crítica
a las ideas morales La
antropología nietzscheana
La voluntad del superhombre La
nueva tabla de valores
Friedrich Niezsche (1844-1900)
Filósofo alemán, nacionalizado
suizo. Su abuelo y su padre fueron pastores protestantes, por lo que se educó
en un ambiente religioso. Tras estudiar filología clásica en las universidades
de Bonn y Leipzig, a los veinticuatro años obtuvo la cátedra extraordinaria de
la Universidad de Basilea; pocos años después, abandonó la docencia,
decepcionado por el academicismo universitario.
La vida del filósofo fue
volviéndose cada vez más retirada y amarga a medida que avanzaba en edad y se
intensificaban los síntomas de su enfermedad, la sífilis. En la actualidad se
reconoce el valor de sus textos con independencia de su atormentada biografía,
durante algún tiempo la crítica atribuyó el tono corrosivo de sus escritos a la
enfermedad que padecía desde joven y que terminó por ocasionarle la locura.
Entre sus principales obras,
destacan: El origen de la tragedia en el
espíritu de la música, Consideraciones
intempestivas, Humano, demasiado
humano, Así habló Zaratustra, Más allá del bien y del mal, La genealogía de la moral, El caso Wagner, Nietzsche contra Wagner, El
crepúsculo de los ídolos, El
anticristo, y Ecce homo.
Crítica a la
Metafísica
La filosofía de Nietzsche supone
un enfrentamiento radical con gran parte de la tradición filosófica occidental,
oponiéndose a su dogmatismo, cuya raíz sitúa en Sócrates, Platón y la filosofía
cristiana.
Respecto a la crítica de la
metafísica, Nietzsche se opone al dualismo ontológico (reflejo del dualismo
platónico): este mundo, sensible e imperfecto; y el otro mundo, suprasensible y
perfecto, fundamento de aquel. Frente a este esquema ontológico reacciona
Nietzsche esgrimiendo tres objeciones:
1.- La infravaloración de la
realidad sensible se debe a su mutabilidad (cambio), mientras que la razón
humana opera con categorías inmutables (sin cambio: conceptos); pero el hecho
de que la razón funcione con tales categorías no demuestra la
"imperfección" ni la "dependencia" del mundo sensible, sino
sólo la inadecuación de la razón para conocerlo... ¿Y si la razón no fuera la
facultad adecuada para conocer el mundo? ¿Es posible acceder de forma no
racional al conocimiento del mundo? ¿Es la razón nuestra única posibilidad
cognoscitiva?
2.- El mundo suprasensible no es
más que una ilusión, una ficción, una fantasía construida como negación del
mundo sensible, única realidad para nosotros.
3.- Recurrir a un mundo
suprasensible lo interpreta, pues, como una reacción anti-vital, como una
negación de la vida, (vida que está marcada por el sufrimiento tanto como por
la alegría), como una venganza contra la naturaleza, propia de espíritus ruines
que odian la vida, un producto del resentimiento contra la vida. Incapaces de
aceptar un destino trágico, los hombres se rebelan contra esa vida que les
aboca al sufrimiento y la niegan, convirtiéndola en un mero residuo de otra
realidad, perfecta ésta, donde ahogan su resentimiento.
Crítica a las ideas
morales
Nietzsche acusa a la moral
platónico- cristiana de antinatural, por ir en contra de los instintos vitales.
Su centro de gravedad no está en este mundo, sino en el más allá, en la
realidad en sí, o en el mundo sobrenatural del cristianismo. Se trata de una
moral trascendente que no gira en torno al hombre, sino en torno a Dios, y que
impone al hombre un rechazo de su naturaleza, una lucha constante contra sus
impulsos vitales, por lo que significa un rechazo general de la vida, de la
verdadera realidad del hombre, en favor de una ilusión generada por el
resentimiento contra la vida. Tal moral es síntoma y expresión de la decadencia
de la cultura occidental.
La antropología
nietzscheana
La antropología de Nietzsche está
en la misma línea crítica de los valores culturales de occidente, el hombre
entra en esa visión pesimista de la decadencia occidental. Para Nietzsche el
hombre es: un ser Miserable, desprecia la tierra, el cuerpo, el instinto; es un
ser a medio hacer entre la bestia y el Superhombre. Es un Animal Defectuoso: es
el único animal del universo que aún está por hacer; corre un riesgo: o vencer
al hombre mediante la superación (convertirse en Superhombre) o volver a la
animalidad. Este hombre se resiste a abandonar los valores del pasado y dar un
nuevo sentido a la humanidad.
La voluntad del
superhombre
El superhombre no se puede
identificar con una clase social con privilegios que descansen en su poder
social (con la aristocracia, por ejemplo), ni con un grupo definido
biológicamente (con una raza), pues los genes no son una garantía de
excelencia. Pero lo podemos reconocer a partir de su conducta moral:
1. Rechaza la moral de
esclavos: la humildad, la mansedumbre, la prudencia que esconde cobardía,
la castidad, la obediencia como sometimiento a una regla exterior, la paciencia
consecuencia del sometimiento a un destino o a un mandato, el servilismo, la
mezquindad, el rencor.
2. Rechaza la conducta
gregaria: detesta la moral del rebaño, la conducta de los que siguen a la
mayoría, de los que siguen normas morales ya establecidas; como consecuencia de
su capacidad y determinación para crear valores, no los toma prestados de los
que la sociedad le ofrece, por lo que su conducta será distinta a la de los
demás.
3. Crea valores: los
valores morales no existen en mundo trascendente, son invenciones de los seres
humanos; pero no todos los hombres los crean, muchos –la mayoría– se encuentran
con los valores ya creados por otros, siguen las modas, los estilos vitales
vigentes; el primer rasgo del superhombre es que inventa las normas morales a
las que él mismo se somete; y además, ha de crear valores que
sean fieles al mundo de la vida y que le permitan expresar
adecuadamente su peculiaridad, su propia personalidad y riqueza.
4. Vive en la finitud: no
cree en ninguna realidad trascendente, ni en Dios ni en un destino privilegiado
para los seres humanos, una raza, una nación, o un grupo; no cree que la vida
tenga un sentido, como no sea el que él mismo le ha dado; acepta la vida en su
limitación, no se oculta las dimensiones terribles de la existencia (el
sufrimiento, la enfermedad, la muerte.
5. Le gusta el riesgo, las
nuevas experiencias, los caminos no frecuentados, el enfrentamiento, las
pruebas difíciles; no está preocupado ni por el placer ni por el dolor, ni propio
ni ajeno, pues pone por encima de ellos el desarrollo de su voluntad y de
su espíritu; es duro consigo mismo y con los demás, es valiente, no huye del
dolor ni de ninguna forma de sufrimiento: sabe que de estas experiencias puede
salir enriquecido, puede crecer.
6. Es contrario al
igualitarismo: ama la exuberancia de la vida, le gusta desarrollar
en él mismo y en los demás aquello que les es más propio; no tiene miedo a
la diferencia.
7. Ama la intensidad de la
vida: la alegría, el entusiasmo, la salud, el amor sexual, la belleza
corporal y espiritual; puede ser magnánimo, generoso, como una muestra de la
riqueza de su voluntad.
8. En conclusión: el
superhombre es la afirmación enérgica de la vida y el creador y dueño de sí
mismo y de su vida, es un espíritu libre.
La nueva tabla de
valores
Nietzsche no propone vivir sin
valores (considera incluso que esto es imposible); propone más bien invertir
la tabla de valores: superar la moral occidental, moral de renuncia y
resentimiento hacia la vida, mediante una nueva tabla en la que estén situados
los valores que supongan un sí radical a la vida.
Nietzsche llama “rebelión de los
esclavos” a la situación que se crea con el triunfo del cristianismo: el
cristianismo y el judaísmo sustituyen la moral aristocrática por la moral de
los esclavos. Con el cristianismo prospera la moral de los débiles, de los
que quieren huir del rigor de la vida inventándose un mundo objetivo, de reposo,
de justicia.
La transmutación de los valores
es la superación de esta moral de esclavos para recuperar de nuevo la moral
aristócrata, y permite el triunfo del código moral del superhombre.
MORAL DE SEÑORES
|
MORAL DE ESCLAVOS
|
voluntad de
jerarquía, de excelencia
|
voluntad de
igualdad
|
ama lo que
eleva, lo noble
|
resentimiento
contra la vida superior
|
quiere la
diferencia
|
iguala,
censura la excepción
|
es la moral
del héroe, del guerrero, del que no teme el dolor ni el sufrimiento
|
glorifica lo
que hace soportable la vida a los pobres, los enfermos y débiles
de espíritu, la concordia
|
altruismo,
hermandad entre los hombres
|
|
es la moral de la
persona que crea valores
|
se encuentra
con los valores dados
|
ama la muerte de
Dios
|
ama y teme a Dios
|
Fuentes de consulta:
Gutiérrez
Sáenz, R. (2007). Historia de las doctrinas filosóficas. Naucalpan,
Estado de México: ESFINGE.
Para
reforzar el tema, observa los videos disponibles en los link siguientes, que detallan
la información:
Nota: Te recuerdo que en la parte superior de esta página, se
encuentra una liga con la que puedes acceder al contenido de la Guía pedagógica
del módulo.
Es momento de realizar en equipo
las evidencias 35 y 37 de tu Guía Pedagógica del módulo (consulta el índice de la misma):
Para la evidencia 35
consulta la Actividad 13. Interpretación de la transformación de la
realidad a través de la crítica y nuevas formas de pensamiento, de tu Guía Pedagógica y posteriormente, realiza
lo siguiente:
Realiza la lectura del texto “Crítica
de la ideología en Marx” (disponible en dicha actividad).
En base al contenido de la
lectura, responde:
¿Qué es la ideología?
Formas distintas de entender la ideología:
Relación de la ideología con la realidad:
Finalmente, determina si
las afirmaciones que se presentan son falsas o verdaderas, colocando sobre la
línea del extremo derecho de cada oración, una “F” para el caso de falso, o una
“V” si se trata de una verdad (en la página 66 viene otra afirmación en la
parte superior).
Marx entiende de dos
formas distintas el término “ideología” _______
La ideología nada
tiene que ver con la vida material de los hombres _______
Cuando la ideología
cae en lo irreal describen una sociedad ficticia y el reflejo del hombre _______
Las ideas nacen de
las relaciones sociales de producción entre los hombres _______
Para Marx, la
ideología es la manera en que los obreros se liberarán de la burguesía _______
La ideología es la
forma en que la burguesía mantiene las condiciones sociales como le convienen _______
La ideología puede interpretarse como una abstracción de la
realidad _______
La ideología nunca
distorsiona la realidad _______
Copia esta información de la
actividad (lo que aparece en color naranja), pégala en un archivo de Word y
responde lo que se te pide. Guarda tu archivo con el nombre EVIDENCIA35, sin olvidar colocar los
nombres de los integrantes de tu equipo y el grupo al que perteneces.
Para la evidencia 37
consulta la Actividad 14. Descripción
de los principales problemas planteados por Nietzsche, de tu Guía Pedagógica y posteriormente, realiza
lo siguiente:
Realiza la lectura del texto ““Genealogía
de la moral y Así habló Zaratustra” (disponible en dicha actividad).
Elabora un cartel en el
que representes algunas de las ideas expresadas por Nietzsche en dichos textos,
es importante que tu cartel:
Genere conciencia sobre alguno de los problemas planteados por la
filosofía existencialista.
Tenga una imagen contundente como parte central del cartel.
Contenga información en palabras, de manera mínima, pero en
relación directa con la imagen.
Toma una fotografía clara de tu
cartel, pega la imagen en un archivo de Word y guárdalo con el nombre EVIDENCIA37, sin olvidar colocar los
nombres de los integrantes de tu equipo y el grupo al que perteneces.
Una vez realizadas las
actividades en equipo, envía en un sólo correo
los dos archivos a la siguiente dirección: laura.aguirrep@conalepgto.edu.mx
La fecha límite de entrega es el próximo viernes 22 de mayo.
No olvides incluir en cada
archivo el grupo al que perteneces y el nombre de todos los integrantes del
equipo, comenzando por sus apellidos.
Te recuerdo que un sólo
integrante es quien debe enviar el correo con las evidencias
Para cualquier duda, utiliza la
aplicación Messenger de tu grupo.
Espera la información e
instrucciones para la próxima semana (25 de mayo de 2020).
Tema 3.2 C Descripción de los planteamientos de
Heidegger
El Dasein como ser en
el Mundo y ser para la muerte
Martin Heidegger (1889-1976)
Tema 3.2 D Descripción de los planteamientos de
Lyotard
Tema 3.2 C Descripción de los planteamientos de
Heidegger
El Dasein como ser en
el Mundo y ser para la muerte
La conciencia: llamada
existencial a la autenticidad
Martin Heidegger (1889-1976)
Filósofo alemán. Discípulo de Edmund Husserl, su
indiscutible preminencia dentro de la filosofía continental se ha visto marcada
siempre por la polémica, sobre todo la de su adhesión al régimen
nacionalsocialista.
Sus principales obras son: Ser y tiempo, Kant y el
problema de la Metafísica, La esencia
del fundamento, y Sendas perdidas,
todas ellas escritas con un estilo bastante difícil.
Su intención es tratar del ser, en toda su amplitud y en
cuanto tal. Él no se consideraba un filósofo existencialista, sin embargo, su publicación Ser y tiempo, es todo un tratado sobre el ser del hombre.
Al leer sus obras, pareciera tratarse de un autor ateo, pues
Dios no figura en su filosofía. Al ser cuestionado sobre el tema de Dios,
respondió que ése no es problema de su Filosofía, y en sus últimos años se
dedicó al estudio de lo sagrado y lo divino.
Desde un principio, Heidegger trata de colocarse en el plano
del ser, elevándose por encima del plano de los entes. No debe confundirse el
ser y los entes. Éstos son las cosas, los existentes, los objetos. En cambio,
el ser es lo que le da inteligibilidad y sentido a las cosas. El ser es el
fundamento de los entes.
El Dasein como ser en
el Mundo y ser para la muerte
Para abordar al ser, Heidegger trata primero el tema del
hombre, porque éste es quien se pregunta por el ser. El hombre es el lugar
donde el ser se esclarece y manifiesta. Por ello, nombra Dasein a la realidad humana. Ese término significa “ser-ahí”, y señala
la especial vinculación del hombre con el ser.”La esencia del Dasein es la existencia”, lo que
significa que lo típico del hombre es existir, es estar lanzado hacia algo, es
dar sentido a las cosas con el mismo ser que lleva consigo.
También se refiere en Ser
y tiempo, al hombre como “ser-en-el-mundo”. Esto significa que lo típico
del hombre es vivir inmerso en una red de relaciones, hacia las cuales proyecta
toda su atención. El mundo es esa red de relaciones, formada por los objetos
que están a la mano, cada uno remite a los demás. Y ese conjunto de relaciones
forma parte integrante del ser de cada hombre. Dicho de otra manera, no se
podría comprender a una persona determinada, sin ese mundo peculiar que lo
rodea.
En su obra, Heidegger explica los existenciales del hombre,
es decir, sus características más importantes, que se podrían reducir a 4:
cuidado, libertad, trascendencia y temporalidad. El hombre es cuidado, o preocupación, es decir, está
lanzado hacia las cosas o instrumentos del mundo. La libertad es el hecho de proyectarse hacia sus propias posibilidades;
el existencialismo ha acentuado esta cualidad humana, opuesta al determinismo
de las filosofías racionalistas. La trascendencia
es lo mismo que la libertad, pues el hombre surge por encima de las cosas, se
escoge y se hace su propio ser, en oposición a los objetos, cuya esencia está
hecha y terminada. La temporalidad
consiste en que el hombre no está en el tiempo, sino que es un proceso de
temporalización, cuyos éxtasis, o salidas de sí mismo, originan los tres
momentos del tiempo entendido corrientemente.
El primer modo de ser del Dasein es ser-en-el-mundo,
el Dasein está arrojado,
eyectado en el mundo; este estar eyectado muestra al Dasein como arrojado a sus posibilidades. El Dasein antes que realidad es
posibilidad, es decir, somos nuestros posibles. Hay infinitas posibilidades
pero algo seguro es que una de esas posibilidades es la Muerte, esta posibilidad está presente en todas las posibilidades;
nos revela la nada, nuestra finitud; además nos muestra que es a la vez la
imposibilidad de todas las posibilidades. Por tanto, la muerte es posibilidad de todas las posibilidades y a la vez
imposibilidad de todas las posibilidades, en la medida en que las habita a
todas. El Dasein es ese ser
en el mundo que también es ser-para-la-muerte.
El Dasein resulta así
despojado de toda esencia, a causa de su finitud, de su temporalidad, por ser
solamente en el modo de la temporalidad. El tiempo del Dasein es anterior al tiempo
lineal, físico y teórico que presupone la concepción aristotélica y la ciencia
moderna. La temporalidad del hombre, devenido Dasein, impide que éste pueda ser al margen del mundo. Es su
temporalidad, en tanto que sentido del ser, la que señala que la existencia,
el Dasein, está ya siempre fuera
de sí, que no se puede entender como campo de inmanencia, que es siempre un
ahí, en el mundo; que está siempre arrojado. Así, esta estructura, o sentido de
la vida (devenida como existencia o Dasein),
es radicalmente temporal. Toda experiencia o fenómeno está ya siempre
atravesada por lo ya-sido o lo por-venir, esto disuelve el presente
trascendental de la conciencia que era el presupuesto de la mirada
fenomenológica.
La conciencia: llamada
existencial a la autenticidad
El hombre “ser ahí”, se reduce a una serie de existenciales,
Heidegger postula dos modalidades que constituyen la existencia del “ser ahí”:
la existencia auténtica y la existencia inauténtica.
El hombre, el Dasein,
se pasa la vida tratando de ocultarse de ser un ser-para-la-muerte; esto revela
la angustia ante la nada, de la cual surge la existencia inauténtica; el ser, está determinado desde afuera,
inmerso en el mundo de lo anónimo, de lo ‘uno’, para ocultarse de la muerte,
tratar de ocultar la finitud del hombre. Pero nadie puede morir por mí,
el Dasein debe aceptar su
temporalidad, su finitud, que ese Dasein dejará
de ser; pues la negación de la muerte es
la esencia de la existencia inauténtica. En cambio, el fundamento de la existencia auténtica es no negar la finitud de la
existencia, es aceptar que se es un ser-para-la-muerte; la autenticidad se
consigue aceptando la finitud, enfrentarse a la angustia; porque cuando se
niega, se condiciona al Dasein a
una existencia inauténtica, ocultándole su finitud, sometiéndole a estar bajo
el ‘otro’; es como haber vivido muerto. La avidez de oportunidades, el otro,
trabaja para la inautenticidad.
La angustia entonces, revela el modo de existencia del ser
humano, la muerte aunque extingue las posibilidades, no las agota.
Para reforzar el tema, observa los videos
disponibles en los link siguientes, que detallan la información:
Tema 3.2 D Descripción de los planteamientos de
Lyotard
Crítica a la modernidad Crítica a
la historia
Jean Francois Lyotard (1924-1988)
Filósofo francés cuyas principales obras son: La condición posmoderna, El entusiasmo, Peregrinaciones, Discurso
Figura, La fenomenología, La diferencia, Economía libidinal, El
inhumano, ¿Por qué filosofar?
De formación fenomenológica, después de ejercer como profesor
durante algunos años y de practicar el activismo político y teórico con el
grupo Socialismo o Barbarie, impartió clases de filosofía como profesor
ayudante.
Lyotard criticó la supremacía que toda la tradición
filosófica occidental desde Platón, ha concedido al discurso.
En Discurso, mostraba la existencia de un espacio alternativo al
discursivo-representativo: se trataba de un espacio figurativo en el que la
esencial opacidad de las imágenes que lo constituyen oponía resistencia a
cualquier intento de traducirlas en términos discursivos y comunicativos. Esta
irreductibilidad de lo figurativo, que emerge con particular energía en el arte
moderno, se halla relacionada con la necesidad de una nueva formulación del
fenómeno de la modernidad.
Crítica a la modernidad y Crítica a la historia
El pensamiento de Lyotard alcanzó su mayor síntesis en la
obra de circunstancias que se publicó en 1979 bajo el título de La
condición postmoderna, y que trata sobre el saber o el estado de los
conocimientos en las sociedades más desarrolladas.
Lyotard toma prestado el término posmoderno, del campo de la
arquitectura y de la crítica literaria norteamericana que lo había puesto en
circulación durante los años sesenta, se dedicó a reformularlo en un momento
que los intelectuales norteamericanos se encontraban interesados en la lectura
de los postestructuralistas franceses, los cuales, pese a sus acusadas
diferencias, pasan a ser encuadrados bajo la denominación de posmodernos.
Calificativo que curiosamente ningún autor ha querido asumir, ni siquiera
finalmente el propio Lyotard que será quien lo pondrá en circulación en Europa.
<<Simplificando al máximo -dice Lyotard- se tiene por
postmoderna la incredulidad con respecto a los metarelatos>>. Por
metarelatos Lyotard entiende las filosofías que pretenden abarcar toda la
historia, como la historia del Iluminismo sobre el progreso gradual pero seguro
hacia la razón y la libertad, la dialéctica de Hegel sobre el Espíritu, el
relato cristiano de la redención de la falta de Adán por amor, los
nacionalismos, el relato marxista de la emancipación de la explotación y de la
alienación por la socialización del trabajo, el relato capitalista de la
emancipación de la pobreza por el desarrollo tecno-industrial, así como el
nacionalismo y todo tipo de mesianismo. Todos estos metarelatos, insiste
Lyotard, están ya fuera de servicio. En parte, como resultado de los tremendos
cambios técnicos, políticos, económicos y militares habidos durante el siglo
XX. Pero sobretodo, a causa de la insuficiencia respiratoria de los mismos.
Ahora bien, esto no quiere decir que no haya relato que no
pueda ser creíble, la decadencia de los grandes relatos no impide que existan
millares de historias, pequeñas o no tan pequeñas, que continúen tramando el
tejido de la vida cotidiana. En su opinión la legitimación, tanto epistémica
como política, ya no puede seguir residiendo en los grandes relatos
filosóficos. La legitimación en la era posmoderna se hace plural, local e
inmanente.
Lyotard es consciente de que estas reflexiones suyas sobre la
condición posmoderna presuponen de alguna manera otro metarelato, una nueva
visión global de la situación de Occidente, contradictoria con su pluralismo,
con su rechazo de las grandes narraciones y la condena de la idea de totalidad.
Abandonado el camino de la fenomenología, del marxismo y del freudismo ortodoxo,
Lyotard hace su giro lingüístico. Con esta reducción de los problemas a su
nivel lingüístico tratará de esquivar hasta cierto punto la contradicción entre
su rechazo del Todo y su visión global del mundo. La manera en que Lyotard
defiende estas ideas es bastante compleja y nada fácil de sintetizarlas en unas
pocas líneas. Para Lyotard vivimos en medio de una pluralidad de reglas y
comportamientos que expresan los múltiples contextos vitales donde estamos
ubicados y no hay posibilidad de encontrar denominadores comunes universalmente
válidos para todos los juegos; frente a este pluralismo las reglas no pueden
por menos que ser heterogéneas.
Lyotard considera que vivimos sumergidos en islotes
culturales sin comunicación, y afirma que Wittegenstein ha demostrado que no
existe una unidad de lenguaje, sino más bien islas de lenguaje, cada una de
ellas regida por un sistema de reglas intraducibles al de los demás. Una
cultura no puede convertir a otra por la persuasión, sino sólo mediante alguna
forma de fuerza imperialista: la búsqueda de consenso, que no sea local y
temporal, se ha convertido en un valor anticuado y sospechoso, porque detrás
del pretendido consenso o las reglas universales de juego se esconde el terror
de los dominadores y el deslizamiento hacia el totalitarismo. Lyotard ve el
consenso sólo como un estado particular de la discusión en las ciencias, pero
no como su finalidad. Su finalidad es la paralogía. Los paralogismos son
un estímulo para nuevos descubrimientos. Son razonamientos falsos, ocurrencias
absurdas contrarias a lo que se ha definido como la recta razón. El paralogismo
rompe con el discurso lineal, razonado y ayuda a ver las cosas desde ángulos
poco usuales y a transitar otros caminos. La ciencia posmoderna se enfrenta con
problemas como el caos, los conflictos caracterizados por la información
incompleta, las catástrofes o las paradojas pragmáticas que no se resuelven por
consenso. La invención nace siempre del disenso y no del consenso.
Lyotard teme que tras los principios universales se escondan
pretensiones totalitarias y tras la búsqueda de fundamentación esté la
metafísica objetivante. Insiste en que el campo de lo social es heterogéneo y
no totalizable. Descarta toda teoría social crítica que emplee categorías
generales como las de clase, raza o género. Desde su punto de vista, tales
categorías reducen demasiado la complejidad de las identidades sociales y por
lo tanto, no son útiles. De esta forma, una gran parte de los pensadores
de la modernidad temprana será sentada en el banquillo de los acusados, siendo
el hegelianismo de izquierdas el principal acusado. Quien persista en los
ideales de la Ilustración se hará sospechoso de totalitarismo por su aspiración
a la ilustración total.
La historia
personal de Lyotard, la evolución de su pensamiento, indican una predisposición
al cambio constante, un talante crítico radical, una búsqueda incesante de los
errores y de los lados oscuros de la modernidad, que nos recuerdan aquella
recomendación de Nietzsche de pensar con el martillo.
"El posmodernismo es
acostumbrarse a pensar sin moldes ni criterios"
Las reflexiones que dominan su discurso, se centran en
la crítica al fracaso de las tres grandes concepciones humanistas que han
guiado a las sociedades durante el último siglo y medio. "La política
liberal y democrática, nacida de la Revolución francesa", aseguró,
"pretendía que la igualdad de oportunidades en el acceso a la educación y
la cultura formaría ciudadanos responsables, capaces de pronunciarse sobre el
destino de la comunidad". Sin embargo, a la hora de los resultados,
considera que "nos encontramos con sociedades en las que la manipulación
del poder y los medias han desplazado a la libertad de pensamiento y para
la que la educación no ofrece una finalidad rentable ni operativa".
El otro gran ideal de la modernidad que, según Lyotard, ha
fracasado, es la búsqueda del mejoramiento económico, a través del trabajo:
"Aunque el nivel de vida es en la actualidad superior al de hace unas
décadas, podemos comprobar que el desarrollo ha provocado una crisis mundial de
empleo y ha logrado neutralizar y dejar fuera del circuito económico a diferentes
sectores sociales".
Este fracaso sería, aparentemente, el motivo de la actual
pérdida de interés por el sindicalismo y la desvalorización de la noción misma
de trabajo. "Ni siquiera la irrupción de las nuevas tecnologías podrá
solucionar esta cuestión, ya que, por el contrario, provocarán nuevos
contingentes de parados".
Por último, Lyotard lleva la crítica al que considera el gran
ideal emancipador de los últimos 100 años -el marxismo-, del que asegura
"se ha convertido en alimento de la policía política y la burocracia
cínica en los países del Este, mientras que pierde credibilidad en
Occidente".
"El fracaso de los grandes ideales de la
modernidad", dice Lyotard, "provoca el titubeo entre la melancolía y
la certeza de que ya no son creíbles ni útiles". Junto a esta duda, está
la evidencia del gran progreso tecnocientífico y económico de Europa. "Los
ciudadanos saben que Europa es hoy uno de los grandes interlocutores
mundiales", aseguró, "una gran potencia, aunque sigan temiendo la
decadencia del continente. Eso es parte de la tradición: creer que Europa está
en decadencia permanente".
Para reforzar el tema, observa los videos
disponibles en los link siguientes, que detallan la información:
Fuentes de consulta:
Gutiérrez
Sáenz, R. (2007). Historia de las doctrinas filosóficas. Naucalpan,
Estado de México: ESFINGE.
Nota: Te recuerdo que en la parte superior
de esta página, se encuentra una liga con la que puedes acceder al contenido de
la Guía pedagógica del módulo.
Es momento de realizar en equipo las evidencias 38 y 40 de tu Guía
Pedagógica del módulo (consulta el índice de la misma):
Para la evidencia 38
consulta la Actividad 15. Interpretación
de los principales problemas planteados por la filosofía existencialista en las
ideas de Sartre y Heidegger, de tu Guía
Pedagógica y posteriormente, considera la extensión que se pide y realiza
lo siguiente:
Redacta un
pequeño cuento en el que representes algunos de los problemas fundamentales
planteados por la filosofía existencialista (angustia, muerte, la nada,
existencia, el ser, libertad, etc.)
Tu cuento
debe tener los siguientes elementos:
- Título
- Descripción del personaje principal y personajes secundarios
- Descripción de la situación en la que se desarrolla la historia
- Referencia directa a problemas existenciales
- Extensión de 1.5 a 3 cuartillas
- Ortografía y redacción correctas.
NOTA. El pensamiento existencialista
de Sartre: al partir de la negación de la existencia de Dios, desde un ateísmo
radical, formulará una explicación de lo que debemos entender por existencia, y
de lo que la existencia significa en el caso de los seres humanos. Suprimido
Dios, el esquema tradicional carece de sentido. No hay una esencia eterna a la
que un ser supremo dota de existencia. La existencia de los seres humanos no se
puede ya reducir a la realización de una esencia pensada por Dios. Los seres
humanos "están ahí", existen como realidades que carecen de una
esencia predefinida; y en ese "estar ahí", lo que sean dependerá
exclusivamente de su modo de existir. Dado que ese existir no es algo
"añadido" a una esencia predefinida, el existir de los seres humanos
es anterior a lo que son en cuanto tales, su existir es anterior a su esencia.
Y en la medida en que su ser esto o aquello depende de su propia realización
como seres humanos, su hacerse, su existir, es un hacer libre. Los seres
humanos no están sometidos a la necesidad de corresponderse a una esencia, por
lo que la existencia debe ser asimilada a la contingencia, no a la necesidad.
Los seres humanos son libres. "Lo esencial es la contingencia", dice
Sartre en La Náusea. "Quiero decir que, por definición, la existencia no
es la necesidad. Existir es estar ahí, simplemente; los existentes aparecen, se
dejan encontrar, pero jamás se les puede deducir. Hay quienes, creo, han
comprendido esto. Aunque han intentado superar esta contingencia inventando un
ser necesario y causa de sí. Ahora bien, ningún ser necesario puede explicar la
existencia: la contingencia no es una máscara, una apariencia que se puede disipar;
es lo absoluto y, en consecuencia, la perfecta gratuidad. Todo es gratuito,
este jardín, esta ciudad y yo mismo". Distingue Sartre en el mundo dos
tipos de realidades o entes, los que son "en-sí", y los que son
"para-sí". Entre estos últimos se encuentran los seres humanos, en
cuanto son conscientes de su propio ser, en cuanto existen, en el sentido
anteriormente señalado. Los demás seres simplemente son. El ser humano, siendo
consciente de su propio ser, y precisamente por ello, existe, ¿Cuál es, pues,
el ser del ser humano, el ser del para-sí? E'l ser del ser humano es la nada,
tomada en su sentido más literal.
Para la evidencia 40
consulta la Actividad 16. Descripción
de los principales problemas planteados por Lyotard, de tu Guía Pedagógica y posteriormente realiza lo siguiente:
- Elabora un cartel en el que representes algunos de los problemas planteados por Lyotard, considerando:
- Debe generar conciencia sobre alguno de los problemas planteados por la filosofía existencialista.
- Debe tener una imagen contundente como parte central del cartel.
- Contener información en palabras, de manera mínima, pero en relación directa con la imagen.
Toma una fotografía clara de tu cartel, pega la imagen en un
archivo de Word y guárdalo con el nombre EVIDENCIA40,
sin olvidar colocar los nombres de los integrantes de tu equipo y el grupo al
que perteneces.
Una vez realizadas las actividades en equipo, envía en un sólo correo los dos archivos
a la siguiente dirección: laura.aguirrep@conalepgto.edu.mx
La fecha límite de entrega
es el próximo viernes 29 de mayo.
No olvides incluir en cada archivo el grupo al que perteneces
y el nombre de todos los integrantes del equipo, comenzando por sus apellidos.
Te recuerdo que un sólo integrante es quien debe enviar el
correo con las evidencias
Para cualquier duda, utiliza la aplicación Messenger de tu
grupo.
Espera la información e instrucciones para la próxima semana
(01 de junio de 2020).
Resultados de aprendizaje:
ResponderBorrar3.1 Distingue las ideas principales de la filosofía moderna considerando los planteamientos de Descartes, Kant, Hegel, Locke y Hume.
3.2 Distingue las ideas principales de la filosofía contemporánea considerando los planteamientos de Marx, Nietzsche, Sartre y Heidegger y la perspectiva contemporánea de Lyotard.